El mercado del sueño, Bajo la tendencia ‘sleep well’: una nueva generación en marcas de estilo de vida, así titulaba un artículo de mediados del año pasado que además de anticipar una tendencia avanzaba lo que este detalla: La productividad pasa por la «recarga». «Desconexión y recarga», como si de nuestros propios gadgets se tratara, se convierten en necesidad personal y vital dentro de nuestro estilo de vida.
Para trazar la tendencia, entre las múltiples señales observadas estaba ya el libro de Arianna Huffington «The sleep Revolution» que escribe al respecto y derivado de su experiencia personal. Su falta de descanso y el colapso de su rendimiento derivado de ello. Para ser productivos y creativos necesitamos un tiempo para «recargar», para reconectar con nosotros mismos.
Por tanto, bajo esta premisa y nueva tendencia, hoy empezamos a sacrificar la del «ALWAYS ON» 24/7 derivada del mundo digital y tecnológico para volver a poner en el punto de mira y resaltar la necesidad del «OFF-PHONE». Un digital detox en toda regla y regular que nos permita regenerar nuestras pilas, nuestro cerebro y nuestras propias energías, el descanso y su relación con la capacidad de ser más rentables e incrementar nuestra capacidad de atención.
En esta línea la propia Arianna Huffington (más conocida por cofundar la web The Huffington Post) ha creado una nueva línea de negocio: Thrive Global.
El video además del enfoque y punto de vista de la creadora nos ofrece una visita (para los que no tengan la oportunidad de visitarla en persona) de la primera tienda pop up dedicada a la desconexión y el descanso. Una espacio y un enfoque que no deja de ser pura ironía, que en palabras de su propia fundadora, define a Thrive Global Store como un «Curator de la mejor tecnología para desconectar de la tecnología», incluido el «phone bed» un lugar de «recarga» para nuestros gadgets tecnológicos en forma de cama donde dejarlos «desconectados» de nosotros:)
Cambios de hábitos y nuevas marcas de estilo de vida para seguir la tendencia de la vida saludable que ya iniciaron mercados como la alimentación y el deporte hace unos años, de cara a la mejora personal, el rendimiento laboral y también el bien social, el gasto en salud pública y privada se incrementa cada año y con estas medidas se pretende trabajar la prevención desde el estilo de vida, sobretodo pensando en las generaciones venideras.
Como ella misma menciona y datos actuales los constatan los más «teens» de la casa o la llamada generación Z, los más jóvenes entre los millenials y con grandes distancias en comportamiento con ellos, son lo que van a sufrir mayor ansiedad con respecto a generaciones anteriores.
La tecnología afecta y no siempre para bien, no solo genera problemas de ansiedad, también depresión y sin duda ha provocado un problema en la capacidad de atención, disminuyendo de forma notable. Hoy un joven solo puede «prestar atención» por tiempo limitado y reducido a 8 segundos aproximadamente derivado de redes tan efímeras e inmediatas como Snapchat, los datos demuestran que sus anuncios solo les prestan atención por menos de 3 segundos. Y lo que es más importante neurocientíficos están ya publicando estudios de como el efecto de la tecnología literalmente está cambiando «mutando» la química de nuestros cerebros.
Suficientes razones y pistas como para saber que en un futuro, ya cercano, la capacidad de desconexión va a ser tan relevante como fue la de conexión.… sino pensar en la necesidad creciente y vital que nos provoco conectarnos a todas horas y quizás hoy, a inicios del 2017, «desconectar y recargar» se haya empezado a dar la vuelta y sea en una de las muchas y principales resoluciones y buenas intenciones para este año que empieza!
Esta y otras tendencias las encontrarás con más detalle, contexto y ejemplos en las tendencias 2017 y de futuro en Nethunting.